domingo, 21 de mayo de 2017

Evaluación y aportaciones de la psicología humanista

➤ Por ahora tengo pensado que ésta será la última entrada que haga al blog. Si en un futuro tengo más información que pudiera servir y aportar a la ya posteada intentaré publicarla, pero, por ahora pretendo que ésta entrada sirva para evaluar y reconocer las aportaciones positivas de la corriente humanista a la psicología.


Como ya se ha mencionado a lo largo de las anteriores entradas del blog, la psicología humanista surge como un "movimiento de protesta en contra del conductismo y el psicoanálisis". (Hergenhahn, 2011). Algunos psicólogos estaban inconformes pues señalaban que "el conductismo se concentraba en tipos de conductas triviales y omitía o minimizaba los procesos mentales y emocionales que hacen únicos a los seres humanos". (Hergenhahn, 2011). Y otros tantos criticaban al psicoanálisis pues consideraban "se enfocaba en los individuos anormales, y hacía hincapié en la motivación inconsciente o sexual" (Hergenhahn, 2011). por lo tanto olvidaba a las personas sanas y también omitía a quienes sus principales motivaciones incluían "el crecimiento personal y el mejoramiento social". (Hergenhahn, 2011).

Y no sólo eso, los psicólogos humanistas también criticaban a la psicología científica en general, puesto que consideraban que el ser humano no se podía estudiar con la rigidez con la que se estudian las ciencias físicas "al asumir el determinismo y buscar la legitimidad de distintas clases de eventos". (Hergenhahn, 2011). Y también dejaba fuera de su análisis muchas cualidades humanas esenciales "debido a la dificultad que entrañaba evaluarlos. Procesos como el de la voluntad, la valoración y la búsqueda de significado son ejemplos de tales atributos, al igual que emociones como el amor, la culpa, el desaliento, la felicidad y la esperanza" (Hergenhahn, 2011).


A pesar de estar en contra en muchos de los preceptos de las demás corrientes psicológicas, los humanistas no niegan que hayan ayudado a la comprensión del ser humano. "Por el contrario, lo que han hecho es afirmar que el conductismo y el psicoanálisis sólo explican una parte del asunto, y que quizá ciertos atributos humanos importantes no pueden ser analizados por medio de los métodos y supuestos tradicionales de la ciencia" (Hergenhahn, 2011). Lo que plantea el humanismo es que si los métodos son ineficaces para estudiar ciertos aspectos de la naturaleza humana, hay que cambiar los métodos.

"La expansión del dominio de la psicología constituye la principal aportación de la psicología humanista" (Hergenhahn, 2011). El humanismo como corriente no niega los descubrimientos de las demás ideologías psicológicas sobre "cómo aprenden, piensan y maduran biológica e intelectualmente las personas" (Hergenhahn, 2011). sino que ahora se centra en sus "metas futuras, y por qué ríen, lloran y dan sentido a sus vidas" (Hergenhahn, 2011). las personas.

Y como en un principio vimos todas las corrientes e ideologías que le dieron forma al humanismo, el humanismo también ha servido para dar vida a una nueva y moderna corriente psicológica, la llamada psicología positiva. La psicología positiva no se dedica al estudio de enfermedades o patologías, sino que su análisis se centra en el estudio de fortalezas y virtudes. Y su tratamiento no sólo intenta reparar lo que no funciona adecuadamente, también se enfoca en cultivar lo mejor que tienen las personas. Su visión de psicología no sólo se enfoca en la enfermedad y en la salud; es algo mucho más grande que eso y tiene que ver con el trabajo, la educación, el entendimiento, el amor, el crecimiento y el juego. El trabajo de la psicología positiva está basado en adaptaciones del método científico a los problemas singulares y no en el pensamiento idealista, la fe, el engaño, a uno mismo o la superficialidad.


Lo último parece denotar que si no puede seguir creciendo en base a sus sustentos teóricos o sus tratamientos, la psicología humanista podría encontrar en la psicología positiva una excelente corriente heredera o inclusive podría servir para una posible unificación tal fue el caso y acierto de la ahora llamada psicología cognitiva-conductual.



Referencias:
Hergenhahn, B. (2011). Introducción a la historia de la psicología, México: Cengage Learning.


sábado, 20 de mayo de 2017

Críticas a la psicología humanista

➤ A pesar de ser una de las principales y más recurridas corrientes de la psicología moderna y de tener muchos simpatizantes, la psicología humanista no se ha librado de tener críticas especialmente apuntando a su falta de solidez:

  • La psicología humanista se identifica con el conductualismo con base en los trabajos de Watson y Skinner. Ambos señalaron que los eventos del entorno constituyen la causa de la conducta humana, y negaron la importancia de los hechos (eventos) mentales.
  • La psicología humanista subestima la naturaleza acumulativa de la ciencia, al insistir en que a la psicología científica no le interesan los atributos humanos más elevados. El tipo de psicología científica que critican los psicólogos humanistas ofrece el fundamento para el futuro estudio de características humanas más complejas.
  • La descripción del hombre que ofrece la psicología humanista representa el pensamiento más idealista y no cuenta con el respaldo de los hechos acumulados por la psicología más objetiva. Se alega que omiten los hechos sólo porque no son gratos. 
  • La psicología humanista crítica a las demás corrientes psicológicas a pesar de que han hecho aportaciones significativas al mejoramiento de la condición humana. Han hecho lo mismo que pretende la psicología humanista.
  • La psicología humanista rechaza la metodología científica tradicional como medio para evaluar las proposiciones formuladas en relación con los seres humanos. En caso de que proponga la intuición o el razonamiento, sería más apropiado hablar de filosofía o incluso de religión, y no de psicología. Lo cual suele considerarse como un retorno al pasado precientífico de la psicología.
  • Al rechazar la investigación animal, los psicólogos humanistas están volviendo la espalda a una extremadamente valiosa fuente de conocimiento respecto de los seres humanos. No aprovechar los hallazgos de la teoría de la evolución en el estudio de la conducta humana constituye, por decir lo menos, un retroceso.
  • Muchos de los términos y los conceptos que los psicólogos humanistas emplean son tan vagos que desafían la posibilidad de definirlos y verificarlos con claridad. Incluso hay confusión en torno de la definición de la psicología humanista.




Referencias:
Hergenhahn, B. (2011). Introducción a la historia de la psicología, México: Cengage Learning.


Abraham Maslow

➤ Uno de los más importantes exponentes de la psicología humanista es Abraham Maslow. De hecho con anterioridad ya hemos posteado una de sus principales ideas (pirámide de necesidades). Maslow nació el 1 de abril en Brooklyn, Nueva York. Era el primogénito de los siete hijos engendrados por una pareja de judíos rusos que migraron a Estados Unidos.

Maslow nunca sintió apego hacía sus progenitores. De su padre Samuel decía que era un amante del whisky, las mujeres y las riñas; a pesar de eso llego un punto en que pudo hacer las paces con él. Mientras que nunca pudo reconciliarse con su madre, incluso se negó a asistir a su funeral; la definía como cruel, ignorante, hostil y tan poco amorosa que casi indujo a sus hijos a la locura. Justo en el odio por su madre Maslow encontró la motivación para su trabajo en la psicología humanista.


Abraham creció solo y con una intensa timidez, buscando refugio en los libros y en las actividades escolares. Dejó sus estudios de derecho en el City College, se matriculó en la clase de Introducción a la psicología dictada por Tichener en la Universidad de Cornell, pero esto no impresionó a Maslow, así que cursó sólo un semestre y regresó al City College, para estar cerca de su prima Bertha Goodman (de hecho se casaron, se mudaron a Wisconsin y tuvieron dos hijos).

A Maslow le gustó el conductismo de John Watson, pero cambió de parecer cuando tuvo su primer hijo. En 1934 terminó sus estudios de doctorado en la Universidad de Wisconsin y su tesis abordó el establecimiento de dominio en una colonia de monos. De acuerdo con sus observaciones, dicho dominio tenía más que ver con un tipo de "confianza interna" que con la fuerza física, esto influyó en su teorización posterior. Tiempo después se convirtió en profesor de la Universidad de Columbia, donde se convirtió en asistente de investigación de Edward Thorndike y también comenzó sus propios estudios sobre la sexualidad humana.


Tras laborar año y medio en Columbia, Maslow se mudó al Brooklyn College donde permaneció hasta 1951. Haber vivido en Nueva York entre 1930 y 1940 le dio la oportunidad de entrar en contacto con eminentes psicólogos europeos que viajaron a Estados Unidos huyendo del terror nazi. Entre ellos estuvieron Erich Fromm, Max Wertheimer, Karen Horney y Alfred Adler. Maslow iba los viernes a los seminarios impartidos por Adler en su propio domicilio. Hacia la misma época, se hizo amigo de la famosa antropóloga Ruth Benedict, más adelante se obsesionó tratándola de entender, pues la consideraba realmente excepcional, ésto evolucionaría hasta convertirse en su propia versión de la psicología humanista.



Referencias:
Hergenhahn, B. (2011). Introducción a la historia de la psicología, México: Cengage Learning.


Psicología humanista y Psicología existencialista

➤ Como se ha hablado con antelación a lo largo de las demás entradas, la psicología humanista comparte orígenes y filosofías con muchos movimientos e ideologías actuales. La psicología existencial tiene mucho en común respecto a la psicología humanista, razón por la cual muchas veces se les agrupa bajo el nombre de "psicología existencial-humanista". Ambas corrientes psicológicas comparten ciertas creencias:

  • Los seres humanos poseen libre albedrío y son, por lo tanto, responsables de sus acciones.
  • El método más apropiado para estudiar a los seres humanos es la fenomenología, es decir, el análisis de la experiencia subjetiva intacta.
  • Para poder comprenderlo, el ser humano debe estudiarse como un todo. El elementalismo de cualquier tipo distorsiona la interpretación de la naturaleza humana.
  • Los seres humanos son únicos y, por consiguiente, todo aquello que se aprenda respecto de otros animales es irrelevante para su comprensión.
  • Cada ser humano es único; en consecuencia, cualquier cosa que aprendamos en relación con uno de ellos es irrelevante para la comprensión de los demás.
  • El hedonismo no constituye una motivación importante para la conducta humana. En lugar de buscar el placer y evadir el dolor, los seres humanos buscan dar sentido a sus vidas y caracterizarlas por el crecimiento personal.
  • Experimentar una vida auténtica es mejor que vivir una existencia inauténtica.
  • En vista de que poseen atributos únicos, como el libre albedrío, los seres humanos no pueden estudiarse con eficacia utilizando la metodología científica tradicional. Quizá sea posible analizarlos con objetividad pero, para ello, será necesario crear una ciencia nueva y exclusivamente humana.
La mayor diferencia entre ambas psicologías se encuentra en la naturaleza humana. Los humanistas suponen que los seres humanos son básicamente buenos y que si se les coloca en un entorno saludable vivirán de manera natural en armonía con sus semejantes. Mientras que los existencialistas consideran la naturaleza humana como esencialmente neutral. Desde la perspectiva humanista, la motivación más importante en la vida es la tendencia a la autorrealización. Para la mirada existencialista lo único que traemos al nacer es la libertad de elegir la naturaleza de nuestra existencia.





Refeencias:
Hergenhahn, B. (2011). Introducción a la historia de la psicología, México: Cengage Learning.


domingo, 23 de abril de 2017

Heidegger: culpa y ansiedad

➤ Como ha venido siendo costumbre últimamente en mis entradas está también tratará acerca de las filosofías que dieron forma a la psicología humanista. Específicamente el existencialismo de Martin Heidegger (1889-1976). Con ésta entrada pretendo terminar con los autores que han influido al humanismo para comenzar a postear entradas que hablen completamente de la psicología humanista.

Se suele considerar el trabajo de Heidegger como un puente entre la filosofía existencialista y la psicología existencial.



Para Heidegger era muy importante que los seres humanos pudieran reflexionar acerca del fin de su existencia, sólo así podrían ejercer realmente su libertad para crear una existencia significativa. Sin embargo, el darse cuenta de la propia mortalidad provoca ansiedad.

Heidegger también creía que si no ejercitamos nuestra propia libertad experimentaremos culpa. Así que como la mayoría de la gente no ejerce toda su libertad, experimentará por lo menos cierta culpa. Para minimizar la culpa Heidegger aconsejaba vivir una vida auténtica, es decir, el reconocer la capacidad de elegir en la propia existencia y vivir de acuerdo con ello.



El pensamiento de Heidegger ahora forma parte de una de las máximas de la psicología humanista al querer hacer consciente y completamente responsable a la persona de todas y cada una de sus decisiones. Además de que Heidegger desde su filosofía ya planteaba una manera de superar la culpa y la ansiedad.

El saber que en algún momento formaremos parte de la nada provoca ansiedad, aceptarlo requiere valentía. La misma valentía que es necesaria para elegir nuestra propia existencia, en lugar de conformarnos con lo que dicta la sociedad, la cultura u otras personas, según Heidegger.



Las mismas condiciones de la existencia y el tomar decisiones implica experimentar cierta ansiedad. Desde la perspectiva de Heidegger, la ansiedad es necesaria para vivir una vida auténtica. Ya "que las personas auténticas siempre están experimentando con la vida, siempre están tomando riesgos y siempre están poniendo en riesgo su devenir." (p. 610)

Otra razón más de la ansiedad causada por la libertad es porque nos convierte en responsables de las consecuencias de nuestras propias elecciones. Cuando un individuo es libre no puede culpar a Dios, ni a sus padres, ni a las circunstancias, ni a la genética, ni a cualquier otra cosa, porque uno es responsable de su propia vida. Idea totalmente humanista y contradictoria a la psicología conductual y al psicoanálisis.

La libertad y la responsabilidad son inseparables.






Referencias:
Hergenhahn, B. (2011). Introducción a la historia de la psicología, México: Cengage Learning.


sábado, 22 de abril de 2017

Aristóteles: motivación y felicidad

➤ Al igual que la entrada pasada me enfocaré en la filosofía de Aristóteles para hablar de los orígenes y bases de la psicología humanista. Ésta hablara de los fines y propósitos de las personas desde la perspectiva aristótelica.



La felicidad para Aristóteles era natural y con ella se cumplía el propósito de la persona. El propósito de los humanos era pensar racionalmente, esto produciría la mayor felicidad. Sin embargo, los seres humanos también comparten apetitos con los animales tales como el alimentarse, el reproducirse y el sentir placer y esto motiva también nuestra conducta.

Nuestra diferencia con los animales es la razón, que nos ayudará a inhibir nuestros instintos, ya que de ellos no se deriva nuestra mayor necesidad. Pero esto representa un conflicto, ya que la encrucijada está entre saciar nuestros apetitos y perseguir nuestras metas racionales.



La misma problemática plantea el humanismo al decir que nosotros siempre debemos tener nuestras metas fijas y ser lo mayormente conscientes de todos nuestros actos para poder ser responsables de cada decisión que tomamos.

Aristóteles dio como solución el vivir una vida con moderación, uno tenía que vivir con su "media dorada", es decir el punto medio en vez de una resolución hedonista o una vida dominada por la razón.



Referencias:
Hergenhahn, B. (2011). Introducción a la historia de la psicología, México: Cengage Learning.


viernes, 21 de abril de 2017

La teleología de Aristóteles

➤ Creo que de acuerdo a las otras entradas del blog ha quedado clara la intención de mostrar todo lo relativo y lo que le ha dado forma a la hoy conocida como psicología humanista. El tema de ésta entrada nos hará remontarnos a los orígenes y a los primeros autores que sin saberlo han formado parte importante de los fundamentos de la teoría humanista.



La filosofía de Aristóteles es un ejemplo de la teleología porque, según él, todo lo que existe en la naturaleza tiene un propósito. Aún más sorprendentemente parecido al actual humanismo, Aristóteles sostenía que ese propósito no significaba una intención consciente, más bien, todo en la naturaleza tiene una función inherente. La función inherente recibe el nombre de entelequia y es la cual permite que un objeto se mueva o se desarrolle en una dirección prescrita hasta alcanzar todo su potencial

"La causa última de los seres vivos forma parte de su naturaleza; existe como un potencial desde el inicio mismo del organismo" 



Aristóteles también pensaba que la causa última, o el propósito, de una cosa era su esencia.

Como hemos podido darnos cuenta la idea de la teleología de Aristoteles se parece mucho a la idea de Carl Rogers. Mientras que el concepto de entelequia se asocia al pensamiento de Maslow y su pirámide.



Referencias:
Hergenhahn, B. (2011). Introducción a la historia de la psicología, México: Cengage Learning.